Biografía

Nació en Sabana de Chavón, La Romana, el 9 de Noviembre de 1937. Estudió derecho y periodismo en la Universidad Autónoma de Santo Domingo. Fue cónsul en La Guaira, Venezuela y viceministro de la Presidencia del gobierno que encabezó el coronel Francisco Alberto Caamaño Deñó.

Ha publicado ensayos sobre el origen del merengue y la narrativa dominicana. Es autor de los libros “Cuentos del Abuelo Julio”, “La ciudad clandestina y los secretos del General” y una novela llamada “Al final del arco iris” (1982). Sus cuentos “A partir de esta noche” y “Sonámbulo” fueron premiados por el Movimiento Cultural Dominicano y Casa de Teatro, respectivamente.

Inició y dirigió por muchos años, el suplemento “Cultura” del periódico El Nacional de ¡Ahora! “Cultura” pronto se convirtió en vocero de voces dominicanas nuevas. “Cultura” estaba abierto a todas corrientes literarias, a diferencia de otros suplementos culturares que existieron (y quizás todavía existen) en la República Dominicana, que eran “mafias literarias” para exponer puntos de vista, tendencias literarias que eran defendidas y/o promovidas por esos “intelectuales”.

Su prosa es precisa y sus temas son en general sociales. Escribió un cuento breve que está entre los cinco o seis mejores cuentos breves escritos en español

viernes, 5 de julio de 2013

¿Servir al pueblo? Proteger los prevaricadores

¿Servir al pueblo? Proteger los prevaricadores

Cuentan que a finales de 1996 o en los primeros meses de 1997, en una reunión sostenida por Leonel Fernández y la gavilla que lo acompaña en el saqueo del país, acordaron acumular un buen botín al amparo del poder, para poder continuar en la actividad pública. El grupo entiende que la política se hace con dinero (que entonces no tenían) y decidieron acopiar riquezas para lograr su objetivo de avasallar el país.
Para la primera acumulación de dinero, los muchachos de Juan Bosch, se dedicaron a tiempo completo a la extorsión, tráfico de influencias, introducción de contrabandos, negociar permisos de importación de alimentos, recibir coimas en las compras que realizaron para el Estado y a toda suerte de actividad que les permitiera estar forrados en dinero para trabajar política.
Ello explica que en el período 2000-2004.ninguno de los cómplices de Leonel, trabajara en otra actividad que no fuese la política
Actuando sin ningún pudor, tan pronto como Leonel Fernández y su gente, volvió al poder en el 2004, reinició la carrera hacia el enriquecimiento ilegal, inmoral, inhumano, usando para si los dineros que debían ser invertidos para el desarrollo del país y la mejoría de las condiciones de vida del pueblo dominicano.
Jamás en la historia nacional hubo un grupo tan descarado que dispusiera a las claras de los recursos del poder para acumular capitales.
Leonel y su grupo se valieron de cualquier acción dolosa que incluyó el uso de militares y policías, el empleo de jueces venales sin distinción de niveles, la compra de conciencias, la compra de votos y voluntades, un déficit monstruoso, acumulado mediante la violación de la ley del presupuesto, en un país donde la impunidad es amparada por la acción de los tribunales.
Lo peor del caso es que sin ser graciosos, sin tener la inteligencia ni las habilidades de los bufones, cometen el descaro de ser burlones.
Niza Campos publicó en Diario Libre los montos de las fortunas de muchos miembros del club de Ali Babá.
Ahora tienen los timbales de usar el Senado para “investigar” el origen de la “fortuna” de Félix Bautista, para lo cual usarán una institución básica de la democracia para apañar vagabunderías. A nadie le cabe duda de que el Senado aceptará como buenas y válidas las informaciones de este Creso dominicano que, como su amo Leonel Fernández, heredaron sus fortunas del Estado. ¡Cosas veredes!
Esa gavilla de asaltantes emplea el poder para beneficio personal y familiar y ampara a sus iguales porque sabe que el largo brazo de la justicia y el inexorable paso del tiempo permitirá, mejor temprano que tarde, que uno por uno sean enviados a la cárcel a expiar sus pecados 

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