Biografía
Nació en Sabana de Chavón, La Romana, el 9 de Noviembre de 1937. Estudió derecho y periodismo en la Universidad Autónoma de Santo Domingo. Fue cónsul en La Guaira, Venezuela y viceministro de la Presidencia del gobierno que encabezó el coronel Francisco Alberto Caamaño Deñó.
Ha publicado ensayos sobre el origen del merengue y la narrativa dominicana. Es autor de los libros “Cuentos del Abuelo Julio”, “La ciudad clandestina y los secretos del General” y una novela llamada “Al final del arco iris” (1982). Sus cuentos “A partir de esta noche” y “Sonámbulo” fueron premiados por el Movimiento Cultural Dominicano y Casa de Teatro, respectivamente.
Inició y dirigió por muchos años, el suplemento “Cultura” del periódico El Nacional de ¡Ahora! “Cultura” pronto se convirtió en vocero de voces dominicanas nuevas. “Cultura” estaba abierto a todas corrientes literarias, a diferencia de otros suplementos culturares que existieron (y quizás todavía existen) en la República Dominicana, que eran “mafias literarias” para exponer puntos de vista, tendencias literarias que eran defendidas y/o promovidas por esos “intelectuales”.
Su prosa es precisa y sus temas son en general sociales. Escribió un cuento breve que está entre los cinco o seis mejores cuentos breves escritos en español
miércoles, 31 de octubre de 2012
Cada quien habla
viernes, 26 de octubre de 2012
Qué ejemplo
miércoles, 24 de octubre de 2012
¡Hasta cuándo!
Hay una constante que no me gusta en la respuesta de nuestro pueblo ante acontecimientos que afectan la sociedad. Un rápido recuento de nuestra historia arroja resultados difíciles de tragar.
Somos víctimas de las maldades de una comparsa de bufones, imitadores de los peores ejemplos, cuyas acciones contribuyen a golpear las aspiraciones de una vida digna.
viernes, 19 de octubre de 2012
El cuento de la cotorra
El gobierno del Partido de la Liberación Dominicana que encabeza su dirigente Danilo Medina aún no tiene los 100 días que se le conceden a las administraciones en lo que cogen el paso.
Resulta extraño que los peledeístas han resultado mejores discípulos y herederos de Joaquín Balaguer que de Juan Bosch.
Lo cierto es que Leonel, artista del birlibirloque, equilibrista de palabra envenenada, encantador de serpientes, ha quedado evidenciado como lo que es: un hombre a quien sólo le interesa su beneficio personal, prueba de ello es que baila en medio de una danza de millones obtenidos al amparo del poder. A nadie le cabe alguna duda del origen de esa fortuna que exhibe.